Dicen que las serpientes ¨fascinan¨ con la mirada a sus presas antes de cazarlas. No sé si será tan así, pero me queda claro que el gato nos fascina con su mirada misteriosa; la fascinación de esta criatura tiene que ver con su mirada especial y tiene que ver con que en su comportamiento hay mucho de doméstico y de cariño hacia nosotros pero también hay muchísimo de salvaje, de indómito, que parece que siempre nos está incitando a querer conquistarlo. Como con el amor imposible, que parte de su atractivo es que siempre querremos conquistarlo, y probablemente nunca nos será permitido conquistarlo del todo...
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