Para llevar el gato al veterinario, resulta útil adquirir uno de esos bolsos como de viaje con ventanita. También, si tu gato es de los que se acostumbraron a pasear con correa, puede ir andando, con la correa; pero en este último caso, estar super atento, que siempre puede haber algún peligro en la calle (sí, un peligro, un perro enorme que se abalance sobre tu gato... a veces esto pasa...) No lo lleves en brazos, suelto, puede asustarse y soltarse, y salir corriendo, con los consiguientes accidentes que esto también puede traer... Gato prevenido... vale por 4.
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