Un gato es mágico porque sabe que estás por llegar a casa, bastante antes de que llegues a casa. Es mágico porque también sabe a qué hora tenés que levantarte, y te avisa justo antes, si te dormiste. Es mágico porque cuando alguien de la casa está de mal humor, se desaparece por un rato muy apropiadamente, no sea cuestión de quedar en el medio de algún entuerto. Y cuando la cosa pasó un poco, se aparece, y reclama para comer. Parece que dijera: Vamos señores retomemos la vida bien que aquí no ha pasao nada ;)
No hay comentarios:
Publicar un comentario