Un gato puede llevarse muy bien con un perro y viceversa si los 2 aprendieron a convivir desde chiquitos. También va en personalidades, y en que el dueño de casa tenga mucha psicología para tratarlos y no haga favoritismos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)



No hay comentarios:
Publicar un comentario